MUSULMANES REACCIONAN CONTRA EL PAPA
20 septiembre 2006. Carlos Pérez Barrera, pbro. En una universidad de Alemania, ante académicos, el Papa Benedicto XVI citó a un autor de la edad media que afirmaba, entre otras cosas, que el Islam, la religión de los musulmanes, se había extendido gracias a la espada. El Papa ha aclarado que sólo citó a este autor pero que eso no quiere decir que haga suyas sus palabras. Algunos musulmanes, hay que dejar claro que no todos sino una minoría, han reaccionado violentamente ante este comentario. Amenazan con atentados en Roma y en el Vaticano, y la televisión nos ofrece imágenes en las que queman banderas y monigotes que representan al cristiano cruzado, la imagen que conservan de nosotros de hace más de 500 años (para ellos no pasa el tiempo).
Se antoja pensar que si esa minoría de seguidores del Islam quiere desmentir al Papa, deberían reaccionar con mansedumbre, haciéndonos ver pacíficamente que la historia verdadera no fue así, que todos han asumido la fe por profunda convicción. Pero si reaccionan violentamente, en vez de desmentir al Papa, le están dando la razón en pleno siglo XXI.
En el cristianismo las cosas son distintas. Cuántas veces hemos leído en libros y revistas que el Evangelio llegó a nuestro continente acompañado de la espada. Pero nadie se atreve hoy día, y desde hace muchos años, a desmentir esta gran verdad histórica. Por un lado, el Mensaje nos lo trajeron aquellos humildes misioneros franciscanos, que llegaron descalzos desde Veracruz hasta el Valle de México, ante lo cual los mismos indios exclamaban ¡Motolinía!, que significa "¡qué pobres!”.
También es cierto que a infinidad de pueblos indígenas los sometieron los conquistadores, armas en mano, y los pusieron bajo la autoridad de la Iglesia. Entre los católicos no hay quien reaccione violentamente ante quienes escriben esas críticas, que las más de las veces provienen de escritores católicos. ¡Qué diferencia! ¿No les parece?
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